

Por: Redacción
Cada 7 de abril, el mundo conmemora el Día Mundial de la Salud, una fecha impulsada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para promover el acceso equitativo a la sanidad y recordar que el bienestar global comienza con sistemas de salud justos, sostenibles y centrados en las personas.
Este año, la OMS lanza una campaña global bajo el lema “Comienzos saludables, futuros esperanzadores”, con el foco puesto en la salud materna y neonatal. La iniciativa tiene como objetivo reducir las muertes evitables y garantizar una atención de calidad desde el embarazo hasta el posparto.
Más allá de recomendaciones médicas, esta campaña invita a reflexionar sobre el papel de los gobiernos, profesionales sanitarios y la sociedad en su conjunto para proteger y priorizar el bienestar de madres y recién nacidos. También subraya la necesidad de servicios accesibles, respetuosos y de calidad, así como de políticas que amparen los derechos de las mujeres y sus familias.
Atención sanitaria universal y de calidad, especialmente en zonas con recursos limitados.
Cuidados integrales tras el parto, una etapa a menudo olvidada.
Acceso garantizado a servicios de salud sexual y reproductiva, esenciales para empoderar a las mujeres.
Inversión en salud materna y neonatal, que no solo salva vidas, sino que fortalece comunidades y reduce desigualdades.
La OMS hace un llamamiento a todos los sectores —sanidad, educación, urbanismo, medio ambiente, entre otros— para trabajar de forma conjunta. Porque cuando la salud empieza bien, el futuro es más justo, más fuerte y lleno de oportunidades.